(Internet / Edición www.soloparatiradio.com).- Un experto (¿?) británico afirmó en un libro publicado por la Universidad de Cambridge que la Última Cena que compartió Jesucristo con Sus 12 apóstoles en la noche del jueves santo se realizó en realidad un miércoles.
El profesor Colin Humphreys declaró al diario The Times que ésta tuvo lugar el miércoles 1 de abril del año 33. En su libro “The Mystery of the Last Supper” (“El misterio de la Última Cena”), el universitario intenta aportar (¿?) información a un tema que, según ellos, divide a teólogos e historiadores.
El problema de estos estudiosos radica en que los religiosos creen que la Última Cena comenzó tras la puesta del sol del jueves y la crucifixión se realizó al día siguiente. Cabe resaltar que los juicios de Jesús se produjeron en varias zonas de Jerusalén.
Así, según declaraciones a la agencia noticiosa que genera esta nota, el profesor Humphreys subrayó en su libro que “los expertos recorrieron la ciudad con un cronómetro para ver cómo se podían producir todos los acontecimientos entre el jueves por la noche y el viernes por la mañana: la mayoría concluyó que era imposible”.
Por otro lado, de acuerdo a la misma agencia, los discípulos Mateo, Marcos y Lucas dicen que la Última Cena fue una comida pascual. Sin embargo, Juan asegura que tuvo lugar antes de la Pascua judía. Respecto a esto, el profesor explica que “la solución que ha encontrado es que todos tienen la razón pero que se refieren a dos calendarios diferentes”.
En conclusión, según este señor, si se reconcilian los dos calendarios, la Última Cena se celebró en realidad la víspera del Jueves Santo.
NOTA IMPORTANTE
“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios.” (1 Timoteo 4:1). Los últimos días son descritos como “tiempos peligrosos” por el incremento en el carácter maligno del hombre y la gente que conscientemente “resistirán la verdad” (2 Timoteo 3:1-9; 4:3-4, ver también 2 Tesalonicenses 2:3).
Nuevamente en Mateo 24, Jesús nos dice las señales específicas que deben ocurrir antes de Su regreso. En los versos 3-14, Jesús las describe como “dolores de parto”, – como signos que indicarán que Su Regreso está cerca. Él utiliza la imagen de una mujer dando a luz. Justo antes del nacimiento del niño, la mujer experimentará los dolores de parto, los cuales comenzarán leves y espaciados, pero se volverán más frecuentes y más dolorosos conforme se aproxima el momento del nacimiento. Los “dolores de parto” que Jesús describe son estos: 1) el surgimiento de falsos Mesías; 2) guerras y rumores de guerras; 3) hambrunas y desastres naturales; 4) incremento en la persecución de la verdadera iglesia de Jesucristo; 5) apostasía general de la gente, al volverse del verdadero cristianismo, a las religiones falsas difundidas por falsos profetas; 6) finalmente, el incremento de la maldad. Mientras que todo esto ya está sucediendo, cuando el final se aproxime, estas cosas se incrementarán como nunca antes; tanto en frecuencia como en intensidad.